INFORMATICA

Ahorrar con profesionales

Es raro el hogar que no tenga material informático en casa, lo hemos normalizado tanto que ahora ya ni siquiera usamos la palabra “informática” para referirnos a estas talets, PCs, teléfonos, impresoras. Si bien lo hemos normalizado e integrado en nuestras vidas, pero hay muchas ocasiones que se nos escapa de nuestro día a día esas actualizaciones o reparaciones de nuestro sistema se nos hacen difícil. Por eso es conveniente contar con un servicio técnico de confianza como el caso del mantenimiento informatico para empresas en malaga que ya usamos sus servicios en nuestra empresa.
Sin darnos cuenta muy bien hemos ido integrando en casa y en nuestras oficinas una cantidad de dispositivos informáticos abrumador, aunque muchos de ellos ni siquiera los llamemos como tal. Hemos pasado de tener un simpe PC de sobremesa y alguna impresora a tener desde teléfonos inteligentes, tablets, algún ordenador de sobremesa, portátiles, uno o varios routers o swich para gestionar nuestra red local, etc ¿a que parecía que o teníamos todo esto?
Una buena configuración de nuestra red es primordial, hasta hace relativamente pocos años no disponíamos más allá de un punto de red en nuestra oficina, pero a raíz de ser tres personas en nuestro proyecto, tuvimos que incluir un disco duro en red para guardar nuestros trabajos mediante una “nube local” y la ampliación de varios puestos informáticos dedicados en exclusiva para uno u otro propósito y una segunda impresora hizo que el “router estándar” de la operadora no fuese lo ideal. La red se colgaba, la conexión a internet caía o se ralentizaba hasta niveles ridículos. Sobre todo el problema era a nivel local, algo que no entendíamos de ninguna manera. Por eso tuvimos que tomar la decisión de contar con profesionales que nos rediseñasen nuestra red local.
Muchos pensamos que sabemos, muchos años de cacharreo nos hacían ser especialistas… grave error que pagamos con retrasos y frustraciones en nuestro día a día. Al principio, y tras años de funcionar sin problemas en nuestro trabajo, estábamos convencidos que podríamos seguir ampliando nuestros puestos sin dificultad, pero lo cierto es que nos confundíamos. Al final ahorramos tiempo y dinero con una simple llamada y una pequeña inversión económica que ya estamos convencidos que hemos rentabilizado. Un profesional vino a nuestro trabajo y al día siguiente desaparecieron nuestros dolores de cabeza. Estoy seguro que la lectura de estas letras ha traído a vuestro recuerdo errores y fallos que estáis seguro que os habríais ahorrado con un buen planteamiento o haber contado de la herramienta adecuada.

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